Se conoció como futurismo a una de las muchas corrientes artísticas que compusieron las vanguardias europeas del siglo XX, surgido en Italia en 1909, cuando el poeta, dramaturgo y editor italiano Filippo Tommaso Marinetti publicó en el diario Le Figaro de París su Manifiesto Futurista.
Se trataba de un movimiento ávido por romper con la tradición, el pasado y lo considerado hasta entonces como rasgos principales del arte y la poesía, postulando en su lugar la exaltación de lo sensual, lo nacional y la irreverencia.